Hoshea perdió la esperanza de que la gente tenga la capacidad de arrepentirse y retornar a la buena senda. Aquel que ya eligió un camino, le será muy difícil cambiarlo y deberá hacerse cargo de las consecuencias de su elección.
“Porque Israel se hizo indomable como novilla cerrera; ¿ahora los apacentará el Señor como a un cordero en lugar espacioso?” (Versículo 16)
¿Cuál es el sentido de la figura de la vaca que se convierte en cordero? En la parábola, la vaca está atada al yugo, y arrastra el arado. La vaca descarriada se rebela, arroja el yugo y la imagen comienza a comprenderse: también el pueblo de Israel arroja el yugo. Y el profeta traslada esta figura a Israel: “ahora los apacentará el Señor como a un cordero en lugar espacioso”-en lugar de ser una vaca, Israel será un cordero-solitario-en el espacio. Los corderos no están acostumbrados aestar solos. Necesitan estar en el marco del rebano, y se amontonan, le dan calor uno al otro en el invierno, le dan sombra uno al otro en el verano. Querían ser una vaca rebelde que no acepta el yugo. Por favor: sean como un cordero solitario, en el espacio campestre, que nadie lo cuida, que nadie lo dirige. La libertad encarnada-pero una libertad triste, estresante, aterradora.
Y el profeta continúa: “¡Efraim está apegado a los ídolos; déjale (oh Iehudá!)” (Versículo 17)
¿Cuál es la explicación de “apegado a los ídolos”? ¿Y dejarlo, de qué?
Rashi y Radak explican, que hay una fase en la cual el profeta deja de reprender. Ya no tiene sentido alguno discutir con el pecador. Que siga en su camino como un cordero en el espacio. Quedará apegado a los ídolos, y hay que dejarlo.
Al decidir la persona su forma de vida, es ella quien la define totalmente. No puede rehusar a las palabras del profeta. Y en el mismo momento, acusarlo porque no impidió que hiciera algo que hizo, que tanto intentó persuadirlo para que no lo hiciera.
Una vez que la persona ya eligió, no puede decir “Uy”-no tuve la intención, y retrotraerse al punto de inicio. La persona es responsable de sus acciones y decisiones, y de las consecuencias de sus actos. Y a veces, una vez que la persona ha decidido encaminarse por una senda determinada, ella misma no está en condiciones de realizar un cambio mental y pensar de un modo diferente. Y ese es el significado de nuestro versículo: “¡Efraim está apegado a los ídolos; déjale (oh Iehudá!)”-Efraim se apegó a los ídolos, él decidió por propia voluntad traicionar a su Dios, unirse al culto no judío. Déjalo, le dice Dios al profeta. No intentes hacerlo retornar a la senda del bien. Ya ha atravesado la línea del “no retorno”, y a partir de ahora, continúa en su camino sin posibilidad de retornar. El individuo está facultado para elegir, él decidió, y desde el momento de la decisión, es el responsable de sus consecuencias.
Editado por el equipo del sitio del Tanaj
Gentileza sitio DAAT