División del capítulo:
Versículos 1-6: El reinado de Hoshea y el exilio de Shomrón
Versículos 7-23: Síntesis profética para la causa del exilio
Versículos 24-33: El ritual de los pueblos que fueron exiliados a Shomrón
Versículos 34-41: La continuación de la descripción de los pecados de Israel
1. Versículos 1-6: El reinado de Hoshea y el exilio de Shomrón
Los versículos describen el exilio de Shomrón, no obstante a partir de varios lugares (así escuché en el pasado del Rabino Yoel Ben Nun) se puede demostrar que no todo el pueblo de Shomrón se exilió y muchos israelitas se quedaron en las aldeas. Así se puede demostrar del relato en Divrei Haiamim II, capítulo 30, alusivo al “Pesaj de Jizkiahu”, cuando él convoca a todo el pueblo a Ierushalaim y envía misivas también a Efraim y a Menashé. Todo ello, a pesar de que es de suponer (aunque también hay otras opiniones) que el episodio se registró tras el exilio de Shomrón. Una evidencia adicional puede ser citada de Irmiahu, capítulo 41, versículos 5-9, donde se relata acerca del asesinato de Guedaliahu a manos de Ishmael hijo de Netanya y sobre un grupo de israelitas proveniente de Shjem, de Shiló y de Shomrón para ofrendar un sacrificio y en el trayecto se notificaron de la destrucción de la Casa y rasgaron sus vestimentas. Al llegar a la ciudad, fueron eliminados por Ishmael. De allí, la evidencia de que había israelitas que vivían en Shomrón, también mucho tiempo después del exilio de Shomrón.
Versículo 2-Debe tenerse en consideración que el exilio de Shomrón tiene lugar, justamente en el período de un rey que no hizo lo malo a los ojos de Dios como los otros reyes.(Pueda encontrarse otra explicación en el Tratado de Guitín 88a).
2. Versículos 7-23: Síntesis profética para la razón del exilio
La descripción de los pecados en estos versículos se divide en dos: hasta el versículo 12 (incluído) y del versículo 13 en adelante. En la primera parte se describe el pecado de la idolatría y en la segunda se describe (principalmente) la terquedad y la falta de atención y escucha a los profetas y a la Torá de Dios.
Versículo 7-debe tenerse en consideración que a lo largo del libro, hasta aquí, el texto enfatizó la responsabilidad del rey por los pecados, aquí la crítica está dirigida al pueblo que continuó en la senda de esos reyes
Versículo 7-este versículo recuerda dos versículos. Recuerda los dos primeros mandamientos de los Diez Mandamientos: “Yo soy Hashem, tu Dios, que te he sacado de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre. No tendrás otros dioses ante Mí” (Shemot, capítulo 20, versículo 2). Con estas palabras, Dios realmente advirtió a Shlomó que si los israelitas no habrán de continuar en la senda de Dios, Él destruirá el Templo: “Y se les contestará: Porque dejaron al Señor, su Dios, que sacó a sus padres de la tierra de Egipto, y echaron mano de otros dioses, y se postraron ante ellos, y les rindieron culto; por esto ha traído Dios sobre ellos todo este mal” (Melajim I, capítulo 9, versículo 9). La similitud idomática nos indica que la advertencia se hizo realidad.
3. Versículos 24-33: El ritual de los pueblos exiliados a Shomrón
La descripción toda se refleja desde el punto de vista pagano, que no contempla contradicción ni problema en adorar a muchos ídolos y sostiene que cada región geográfica tiene su propio dios. En lo concerniente al hecho de que ellos adoran tanto a sus dioses como a Hashem, el comentarista Radak amplía este criterio y propone que se trata de una mediación entre ellos y Dios y no concretamente de adorar dos fuentes separadas.
4. Versículo 34-41: La continuación de la descripción de los pecados de Israel
Aquí, los versículos se reflejan como contradiciendo lo mencionado anteriormente. El versículo 24, repentinamente, critica el doble servicio y luego se relata acerca de un pacto que desconecta a los adoradores de la idolatría. ¿A quién se hace referencia aquí? El comentarista RaDaK (Rabí David Kimchi) realiza dos propuestas: una propuesta es que aquí se refiere a los israelitas exiliados y no a los Shomronim traídos por los asirios. La segunda propuesta alude a los Shomronim y a partir de una hipótesis de que a posteriori se convirtieron y debieron dejar el paganismo. El comentarista Ralbag (Rabí Leví Ben Guershon) propone que se refiere a los israelitas que no fueron exiliados y se quedaron en Shomrón (Ver lo mencionado anteriormente).