¿Acaso después de casarse las hijas de Tzelofjad, la heredad fue puesta a su nombre perpetuando el nombre de la familia de su padre, o tal vez fue incluida en la tierra de sus maridos? Excavaciones arqueológicas realizadas en la ciudad de Shomrón brindan una respuesta a este interrogante.
En excavaciones realizadas en un complejo real de la ciudad de Shomrón, en una construcción denominada “edificio de los depósitos”, fueron hallados 63 fragmentos de cerámica que tenían destacado la cantidad de envíos de vino y aceite. Los documentos incluyen la fecha del envío, acorde a los años del rey en cuyo período fue elaborada la lista, el lugar de envío del pedido, y así también los nombres de las familias y personas que realizaron los pedidos. En parte de las cerámicas estaba escrito también el contenido del pedido, “una jarra de cerámica con vino añejo” o “una jarra de cerámica con aceite refinado para higiene”, y asimismo los nombres de 16 sitios que representaban la dirección del envío. En lo que a nosotros concierne, las cerámicas contienen 7 nombres de familia mencionados en el libro Bamidbar como pertenecientes a la tribu de Menashé: Shmidá, Aviezer, Jelek, Shejem y Asriel. Además de estas familias figuran dos nombres adicionales de las hijas de Tzelofjad: Noa y Joglá.
De acuerdo a los nombres de los sitios que aparecen en las cerámicas, dichas familias vivían principalmente en el norte del Shomrón, al norte de Shejem. El análisis de los nombres indica que las diferentes franjas de tierra de las cuales fueron traídos los pedidos de vino y aceite fueron denominadas con el nombre de las hijas: la tierra de Joglá y la tierra de Noa. A estas hijas se debe agregar también a Tirtza, que por ella la ciudad ubicada al noreste de Shejem fue denominada Tirtza, y es identificada con el sitio denominado en árabe “Tel Paró” (Norte). Esta ciudad fue también utilizada en una época determinada como capital del reino de Israel.
Parece entonces, que la heredad de al menos tres de las hijas de Tzelofjad lleva sus nombres, y dicho nombre fue preservado cientos de años después de la división de tierras realizada por Moshé.
Editado por el equipo del sitio del Tanaj del libro "Parashat Drajim: Mabat arjeologui vegueografi beparshiot hashavua" ("Encrucijada: una mirada arqueológica y geográfica de las secciones semanales de la Torá") publicado por "Maguid", 2014.