La virtud de la bondad es inherente a nosotros

La virtud de la bondad es inherente a nosotros

Todos hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios, por ende, las virtudes divinas, como bondad y misericordia, son inherentes a nosotros de un modo básico. Nuestra meta es la de exhibir esas virtudes que se hallan en nuestro ser y aprovecharlas de la mejor manera.

“En pos de Adonai, vuestro Dios, se habrán de encaminar, y a Él habrán de venerar, sus mandamientos, habrán de cuidar y su voz habrán de escuchar, y a Él habrán de servir y a Él habrán de adherirse” (Versículo 5)

Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria, en el Tratado de Sotá 14a señalan:

“Y dijo Rabí Jama Bar Rab Janina, ¿qué significa “En pos de Adonai, vuestro Dios, se habrán de encaminar” (Devarim capítulo 13, versículo 5)? ¿Acaso la persona puede encaminarse detrás de la Divinidad? Si ya fue mencionado: “Ya que Adonai, tu Dios, fuego que consume es” (Devarim capítulo 4, versículo 24), sino que se refiere a encaminarse detrás de las virtudes de Dios: así como Él viste a los desnudos…también tú debes hacerlo; así como Dios visitó a los enfermos… visita a los enfermos, tú también; así como Dios consoló a los dolientes…también tú, consuela a los dolientes; así como Dios sepultó muertos…también tú, sepulta muertos”

¿Cuál es el significado del Midrash?

La explicación simple del Midrash es que si Dios actúa con bondad, sepulta a los muertos y visita a los enfermos, he aquí que se trata de acciones importantes  y significativas, por lo cual también nosotros debemos realizarlas.

No obstante, estos conceptos pueden ser comprendidos de un modo más profundo. Dios creó a la persona a imagen y semejanza Divina. Por consiguiente, debido a que vemos que Dios es misericordioso, he aquí que en nuestro interior también existe la virtud de la misericordia. Si Dios actúa con bondad, pues también en nosotros se halla dicha cualidad de bondad. No hay aquí solamente un intento de emular a Dios. ¡La virtud de la bondad es inherente a nuestra naturaleza! No debemos buscar  la cualidad de la bondad en una fuente externa. La virtud de la bondad se halla en cada uno de nosotros. Todos fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, con las mismas virtudes Divinas elementales. Nuestro objetivo es el de descubrir dichas virtudes que se hallan en nuestro interior y aprovecharlas de la mejor manera posible.
Editado por el equipo del sitio del Tanaj
Gentileza de la Ieshivat Hesder "Ierujam".

 

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