Desde el inicio, Mordejai determinó que todos los judíos celebren Purim durante dos días. ¿Cuál es la naturaleza de esos dos días? ¿Qué se celebra en el primero y qué en el segundo?
Tras la guerra de los judíos contra sus enemigos, y el gran milagro ocurrido, Mordejai define que a raíz del milagro, los judíos celebren dos jornadas festivas, en las calles del reino de Ajashverosh, los días 14 y 15: “Y escribió Mordejai…y envió cartas a todos los yehudim que había en todas las provincias del rey Ajashverosh…ordenándoles que observasen el día catorce del mes Adar, y el día quince del mismo, todos los años…haciendo los días de banquete y de regocijo, y de enviar presentes los unos a los otros, y de hacer dádivas a los pobres (Versículos 20-22). Sólo a posteriori, lo integrantes de la Gran Asamblea dividieron los días festivos y determinaron que los habitantes de ciudades sin muralla celebrarán el 14 de Adar, mientras que los que residen en ciudades amuralladas, lo festejarán el día 15
A partir del sentido literal de los versículos no queda claro cuál es la naturaleza de las dos jornadas festivas establecidas por Mordejai, pero a la luz de lo relatado en el texto acerca del desarrollo de la guerra, se puede suponer que en el primer día festivo celebraron la salvación obtenida en el primer día del enfrentamiento, y en el segundo día, conmemoraron la venganza d los judíos de Shushán contra sus enemigos. Ambas jornadas se complementan. La sobrevivencia destacada en la primera jornada, es, de hecho, importante, pero expresa las cualidades materiales del ser humano, que como todo ser vivo, trata de sobrevivir y se alegra cuando logra salvarse de un peligro. A diferencia de ello, en la segunda jornada, nos alegramos por la venganza, que es una cualidad particular del ser humano y refleja su imagen y semejanza con D-s. El sentido de la venganza judía, la que hallamos en la Meguilá, no es, D-s libre y guarde, una venganza salvaje y descontrolada, que, como consecuencia de la misma, también son perjudicados los inocentes. En el judaísmo, la venganza es un acto de justicia, una reparación que se pone de manifiesto a través del merecido que reciben los malvados. Al vengarse los judíos de Shushán de sus enemigos, están luchando contra los malvados de alrededor y los castigan por sus actos y conspiraciones. Las dos jornadas que establece Mordejai, señalan la alegría por el hecho de la vida, y la revelación del reino de D-s en el mundo que se pone de manifiesto en la guerra de los judíos contra sus enemigos, haciendo justicia con los malvados.
Resumido y editado por el equipo del Tanaj, extraído de una clase del sitio Keshet de la Academia Rabínica Har Etzion