Tras escuchar Abigail que David planea atentar contra Nabal y todo lo suyo, se apresura para ir a su encuentro y con un discurso muy bien planificado lo convence de que no atente contra Nabal. Sus conceptos no fueron dichos del “estómago”  y su discurso fue pronunciado tras una programación y selección de las palabras adecuadas a fin de calmar a David.

Después de que Nabal se negara a pagarle a David a cambio de la protección que le brindaron los hombres de David y luego de los duros conceptos que expresara en referencia a David (10-11), David le declara la guerra y asciende con cuatrocientos hombres para asestarle un duro golpe a Nabal y su gente. Uno de los jóvenes de Nabal le cuenta a Abigail lo que está a punto de ocurrir y ella se apresura a actuar: en primer lugar, envía un presente (18-19), del mismo modo que lo hizo Iaacov con Labán (Bereshit capítulo 32). Luego, se dirige al encuentro de David montada en un burro, y tras encontrarse con él y arrodillarse ante él, intenta convencerlo para que cambie de opinión.

Se puede contemplar que su discurso, como otros numerosos discursos en el Tanaj, está muy bien construido y planificado al utilizar Abigail diversos recursos retóricos, a fin de convencerlo a David para que se retracte. Nos centraremos en los puntos centrales.

Su discurso se divide en dos partes: Los versículos 24-27 que abordan el presente y los versículos 28-31 que contemplan el futuro. Ambas partes comienzan con una actitud de auto-culpa, a fin de atraer la atención de David y provocar que la escuche. En la primera parte de su discurso, ella utiliza una serie de recursos retóricos para persuadirlo:

En el versículo 26, ella comienza con una bendición a David por el hecho de que D-s evitó que derramara sangre. Ella habla a partir de la hipótesis de que ya lo convenció a David, a pesar de que él aún no reaccionó a sus palabras
En la continuidad del versículo, ella insinúa que Nabal habrá de recibir su merecido. Tú, David, no debes utilizar tu espada pero no te preocupes: D-s lo castigará y la justicia saldrá a la luz.
En el versículo 27, ella sostiene que de hecho, David recibió la paga adecuada con el importante presente que ella le ha enviado.

A continuación, en los versículos 28-31, Abigail pasa a referirse al futuro de David y enfatiza que justamente por el hecho de que tú habrás de reinar, no puedes permitirte caer en el pecado de derramamiento de sangre. En el futuro habrás de librar guerras importantes, pues, ¿por qué te habrás de ocupar de asuntos menores?

La reacción de David indica acerca del éxito del discurso: en tres ocasiones dice “Baruj”, “Bendito”. Al comienzo, bendice a D-s y luego a Abigail por haber impedido que realizara un derramamiento de sangre innecesario.