Linea de tiempo
1 Shmuel
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1
Janá y Shmuel, Elí y sus hijos
Elí
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3
La consagración de Shmuel
Elí
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4
La guerra de Even Haezer (1)
Elí
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5
El Arca en manos de los pelishtim (filisteos)
Los traslados del Arca
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6
La devolución del Arca a Israel
Los traslados del Arca
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7
La guerra de Even Haezer (2)
Shmuel
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8
La solicitud del rey
Shmuel
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9
Buscó asnos y encontró un reinado
Shmuel
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10
La coronación de Shaúl
Shmuel
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11
La guerra contra Amón
Shaúl
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12
El discurso de despedida de Shmuel
Shaúl
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13
La guerra de Shaúl y Ionatán contra los pelishtim (filisteos)
Shaúl
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15
La guerra contra Amalek
Shaúl
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16
La unción de David
Entre Shaúl y David
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17
La batalla de David y Goliat
Entre Shaúl y David
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18
Los celos de Shaúl con David y sus intentos de eliminarlo
Entre Shaúl y David
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20
El pacto de David y Ionatán
Entre Shaúl y David
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21
David en Nov y en Gat
Entre Shaúl y David
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22
La matanza de los Cohanim (Sacerdotes) de Nov
Entre Shaúl y David
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23
David en Keila y Zif
Entre Shaúl y David
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24
El episodio de la cueva
Entre Shaúl y David
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25
El episodio de Naval y Avigail
Entre Shaúl y David
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26
El episodio de la espada y del cántaro de agua
Entre Shaúl y David
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27
David con Ajish rey de Gat
Entre Shaúl y David
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28
Shaúl y la pitonisa
El final del reinado de Shaúl
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29
El rechazo de David por parte de los pelishtim (filisteos)
El final del reinado de Shaúl
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30
La guerra de David contra Amalek
El final del reinado de Shaúl
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31
La muerte de Shaúl y sus hijos
El final del reinado de Shaúl
1 Shmuel 15 Versículo 1
Don Isaac Abarbanel señala que, por ser que Shaul es el rey del pueblo de Dios, de Israel, entonces es el que debe velar por el honor de ellos (tanto de Dios como de Israel) y vengar el desprecio y maldad de Amalek contra ellos.
Metzudat David explica que, Shmuel le recuerda esto, para que le sea como ejemplo que, así como se ha cumplido la palabra de Dios que dijo por su intermedio, y efectivamente Shaul se ha convertido en rey, así también debe saber que, lo que le dice ahora, también es la palabra de Dios y debe cumplirla fielmente, sin poner en tela de juicio nada de lo que le encomiende.
Abarbanel dice que, a pesar que el texto no cita literalmente la orden de Dios a Shmuel para que le diga a Shaul eso, no cabe duda que, lo que Shmuel dice, es por orden de Dios y que el texto quiso resumir y por eso es que cita en las palabras del profeta la orden de Dios. Y, al ser que Shaul estaba muy inmerso en las guerras contra los Pelishtím y los demás pueblos, es por eso que Dios debe recordarle el precepto de destruir a Amalek
Los comentaristas recalcan que, a pesar que la vez anterior Shaul ya había fallado al no esperar a que llegue Shmuel para brindar la ofrenda en Guilgal, y por ello le fue decretado que su reino no se extendería, tal como dice en 13:13 Y dijo Shmuel a Shaul: Has obrado neciamente; no has guardado el mandamiento que el Señor tu Dios te ordenó, pues ahora el Señor hubiera establecido tu reino sobre Israel para siempre; no obstante, tenía Shaul la posibilidad de componer esa situación, se le estaba dando otra oportunidad de corregir su error, si cumplía estricta y meticulosamente lo que Dios le encomendaba, entonces, lo que dijo antes: me ha enviado el Señor para que te ungiera por rey sobre Su pueblo, sobre Israel podría aun ser vigente.
El motivo por el cual dice: sobre Su pueblo, sobre Israel a pesar que suena redundante, es porque, lo que Amalek había hecho cuando el pueblo de Israel salió de Egipto, no solo fue una agresión a todo el pueblo de Israel, sino que, al ser Israel el pueblo de Dios, fue también una afrenta a Dios.
Rashí señala que, Shmuel pareciera suplicarle a Shaul que esta vez, no cometa errores, la vez pasada ya había actuado neciamente (13:13 Has obrado neciamente; no has guardado el mandamiento que el Señor tu Dios te ordenó), esta vez, debe estar bien atento y prestar mucha atención, no se trata de un consejo de algún amigo, se trata de la palabra de Dios: ahora pues, está atento a las palabras del Señor.
1 Shmuel 15 Versículo 2
Continúa Daat Mikrá diciendo que, utiliza ese Nombre de Dios (Señor de los ejércitos) para insinuarle a Shaul que esa guerra contra Amalek es una guerra de Dios (Shemot 17:16 y dijo: El Señor ha jurado; el Señor hará guerra contra Amalek de generación en generación.
Radak explica que, cuando se utiliza el verbo: recordar, con respecto a Dios, debe entenderse como que Dios considera apropiado que llegó el momento de realizar un acto al respecto. Es por eso que en nuestro caso específico se refiere a que, al ser que ya hay un rey sobre Israel, y que éste está entrenado en la guerra, llegó el momento de castigar a Amalek por toda su maldad, y de esa manera, aleccionar a todas las demás naciones, tal como lo hizo Dios con Sodoma y Gomorra, para que no obren a la manera de Amalek.
Daat Mikrá dice que Dios utiliza el verbo recordar para insinuar el precepto bíblico de (Debarim 25:17) de destruir al pueblo de Amalek: Recuerda lo que te hizo Amalek, en el camino, cuando saliste de Egipto y lo acentúa en el versiculo19 al concluir enfáticamente: ¡No lo olvides!
Don Isaac Abarbanel dice que, Amalek, a diferencia de otros enemigos, luchó contra Israel, sin haber mediado ninguna agresión o motivo para ello; por lo tanto, lo que lo animó a actuar así, fueron sus ansias de menospreciar a Dios y rebajar toda la fama y gloria que había causado entre los pueblos que vieron las maravillas que Él obró en Egipto y el mar Rojo. Por otro lado, también contra Israel obró infamemente, pues, al considerarse Amalek el descendiente de Esav, consideraban que ellos eran los merecedores de los privilegios de la primogenitura de Esav que Yaacob le había “robado”.
Más aún agrega Abarbanel, en su momento, cuando sucedió el ataque de Amalek cuando Israel salió de Egipto (tal como lo relata en Shemot 17:9 Y Moshé dijo a Yehoshua: Escoge hombres, y sal a pelear contra Amalek. Mañana yo estaré sobre la cumbre del collado con la vara de Dios en mi mano.Y Yehoshua hizo tal como Moshé le dijo, y peleó contra Amalek), Moshé vio tan despreciable a Amalek, que no quiso salir él mismo, ni que saliera todo Israel a pelear contra Amalek, para no darle ningún tipo de honra o importancia a ese pueblo tan ruin e indigno, es por eso que, para despreciarlo aún más, envió a Yehoshua con solo unos pocos hombres.
Sobre este tema se explaya Malvim y, en un extenso comentario señala que, normalmente los pueblo luchan por una de las siguientes causas:
1. Luchar por un territorio.
2. Cuando el enemigo se acerca demasiado a las fronteras de otro país, pues temen que pueda invadirlo o robar sus recursos, como lo fue la guerra contra Og y Sijón.
3. Cuando existe un conflicto entre las dos naciones.
4. Cuando se quiere demostrar poder y dominio y así lograr atemorizar y persuadir a otros pueblos.
5. Por cuestiones religiosas o celo de la causa Divina, como el caso de Pinjás.
Con el pueblo de Israel no se dio ninguna de estas posibilidades, pues:
1. Israel no representaban una amenaza al territorio de Amalek, pues tal como nuestro versículo lo especifica, Israel estaban en el camino, por lo tanto, no iban a conquistar ese sitio.
2. El pueblo de Israel no se acercó a las fronteras de Amalek, pues como testimonia el versículo mientras subía de Egipto y eso era lejos de su territorio.
3. El pueblo de Israel no guardaba ningún conflicto contra Amalek, tal como dice: en el camino, es decir, algo completamente fortuito.
4. El ataque de Amalek fue contra gente débil y cansada, pues en Debarim 25:18 el versículo dice: y él atacó entre los tuyos a todos los débiles en tu retaguardia cuando tú estabas fatigado y cansado, por lo tanto, no sería ningún acto de bravura o valentía.
5. El accionar de Amalek no fue motivado por una cuestión religiosa ni de fe, tal como dice; y él no temió a Dios
Por lo tanto, concluye Malvim, el único motivo de Amalek en aquella guerra, fue su naturaleza malvada y rebelde a Dios, para demostrar que todas las maravillas que obró Dios por el pueblo de Israel, fueron mera casualidad. Además, y sumado a ello, también estaba el odio al pueblo de Israel, heredado de su ancestro Esav.
1 Shmuel 15 Versículo 3
Malvim resalta que el versículo primero dice lo qué hacer con sus pertenencias (destruirlas y no tener ningún provecho de ellas) y luego especifica lo qué hacer con las personas.
Radak explica que, Dios, sabiendo lo que en realidad sucedería, es por eso que le advirtió previamente y en forma muy clara y detallada de no dejar nada, sin embargo, a pesar de ello, como veremos más adelante en el versículo 9, tanto Shaul como el pueblo, no cumplen lo que Dios les dijo Y se apiadó Shaul y el pueblo de Agag, y de lo mejor de las ovejas, de los bueyes, de los animales.
Cuando menciona: y no te apiades de él dice Daat Mikrá, que se refiere a no apiadarse de él ni tampoco de sus pertenencias. De esa forma se cumplirá lo que dijo la Tora: borrarás de debajo del cielo la memoria de Amalek; no lo olvides. Pues si deja alguna pertenencia suya, la gente dirá que eso era de Amalek, por lo tanto, seguirán recordando su nombre.
El motivo por el cual Dios decreta algo tan determinante contra Amalek, explica Abarbanel, es que, al tratarse de un pueblo tan malvado, que además tuvo el atrevimiento y descaro de querer enfrentar a Dios y desmerecer Su obra, como así ensañarse vilmente contra gente desprotegida que nada le hizo, es por eso que Dios determina categóricamente que no quede ni el más mínimo recuerdo de él.
Un punto más agrega Don Isaac Abarbanel, la intención también era que, a ningún pueblo le quede la duda del motivo por el cual Dios ordena la guerra y la destrucción total de Amalek, y como consecuencia, todos aprenderían la lección, (tal como había sucedido con el diluvio y con Sodoma y Gomorra), y para ello, era indispensable que ninguno del pueblo de Israel tomara nada del botín de guerra, así todos sabrían que la guerra no fue por territorio o para tener siervos o aprovecharse de la riqueza del ganado y pertenencias, sino que fue meramente, para establecer un orden de justicia y misericordia en el mundo y entre los pueblos. En el diluvio y con Sodoma y Gomorra, fue Dios el que les dio la lección para que la humanidad aprendiera y no lo repita; ahora, con Amalek, será Israel (el pueblo de Dios) el encargado de realizar la tarea.
Esto mismo fue lo que hicieron luego los judíos en la época de Esther, que no tomaron nada del botín, cuando el malvado Hamán, descendiente de Amalek quiso matar a todos los judíos, al desbaratarse el plan de Haman, el rey Ajashverosh, autorizó a que los judíos puedan defenderse y escarmentar a sus enemigos, allí, nos cuenta la Meguilar Esther 9:10, que el pueblo de Israel destruyó a sus enemigos: Y los judíos hirieron a todos sus enemigos a filo de espada,… y a los diez hijos de Amán, hijo de Hamedata, enemigo de los judíos; pero no echaron mano a los bienes. Tal como Dios le había ordenado a Shmuel en nuestro versículo.
1 Shmuel 15 Versículo 4
1 Shmuel 15 Versículo 5
Malvim dice que, Dios le había encomendado en la Tora que Amalek sea destruido a causa de su maldad, pero Shaul trata de buscar una excusa para comenzar una guerra contra ellos, (¿tal vez temía la reacción de los demás pueblos si atacara sin un motivo justificado?), es por eso que primero se instala en aquel arroyo cerca de la ciudad de Amalek, como reclamándolo como propio, y entonces Amalek al no aceptar que le usurpen esas aguas, sale a la guerra, es decir, a los ojos de los demás pueblos, esta fue una guerra por una disputa acerca de las aguas de aquel arroyo y no a causa de lo que la Tora había estipulado.
1 Shmuel 15 Versículo 6
El motivo por el cual menciona tantos verbos, es para apresurarlos y estimularlos a que actúen con rapidez.
Don Isaac Abarbanel sugiere que, cuando Shaul les dice: porque vosotros mostrasteis misericordia a todos los hijos de Israel cuando subían de Egipto se refiere justamente al contrario de la actitud de Amalek, de esta manera, los Kenim sabrían que, la guerra de Shaul contra Amalek era por lo que había sucedido al salir de Egipto. Y al ser que la actitud del pueblo de los Kenim era completamente opuesta a la de Amalek, por lo tanto, no sería justo que ambos mueran en la misma guerra.
Radak dice que se refiere más específicamente a Itró, que aconsejó a Moshé que ponga jueces para ayudarlo a juzgar a todo el pueblo y no tengan que esperar tanto a que Moshé pueda atender a cada uno y uno. También se refiere a lo que había hecho Yael, que fue relatado en Shofetim capítulo 4:17 Y Siserá huyó a pie a la tienda de Yael mujer de Jeber el Kení; porque había paz entre Yabín rey de Jatzor y la casa de Jeber el Kení … Y Yael, mujer de Jeber, tomó una estaca de la tienda, y poniendo el mazo en su mano, vino a él calladamente, y le clavó la estaca en su sien, y cayó a tierra; y él estaba cansado y dormido; y murió
1 Shmuel 15 Versículo 7
Con respecto a Shur, hay quienes sostienen que se refiere a un territorio que estaba cercano a Egipto, y hay otros que afirman que se trataba de que los persiguió hasta donde comenzaba el camino que conducía hacia Shur frente a Egipto.
Daat Mikrá aclara que, Shaul no destruyó completamente a todos los de Amalek, sino que se centró en las ciudades y campamentos más grandes de aquel malvado pueblo.
1 Shmuel 15 Versículo 8
Daat Mikrá dice que Agag no era un nombre propio, sino que era el título de honor que portaban los reyes de Amalek; así como en Egipto a los reyes se los denominaba faraón.
El motivo por el cual dejaron vivo a Agag es motivo de discordia, hay algunos comentaristas, que tratan de juzgar en forma benévola esta actitud errada del pueblo y sostienen que la intención no era desobedecer a Dios que había ordenado destruir todo, desde hombres hasta mujeres y niños, (mucho más al rey); lo que quisieron hacer era llevar al rey encadenado, como trofeo de guerra y matarlo a ojos de todo el pueblo en la ciudad real del vencedor.
Otros, (basándose en lo que dice el próximo versículo que el pueblo se apiadó de Agag) opinan que la idea no era llevarlo para matarlo, sino que, entre los pueblos antiguos de medio oriente, la usanza era que no se mataban a los reyes, sino que se les perdonaba la vida y se llevaban a vivir con el rey vencedor (tal vez para que, con su experiencia pueda brindar algunas ideas o concejos útiles), así veremos que en Shofetim 1:7 nos relata este tipo de costumbre Entonces dijo Adoni-Bezek: Setenta reyes, cortados los pulgares de sus manos y de sus pies, recogían las migajas debajo de mi mesa.
A pesar que aquí el versículo afirma que a todo el pueblo destruyó a filo de espada se refiere a que destruyó a la gran mayoría, no obstante, algunos que estaban dispersados o en pequeñas aldeas nómades en medio del desierto, ellos sobrevivieron, tal como veremos luego que en la época de David habían quedado gente de este pueblo, y David lucha contra ellos.
1 Shmuel 15 Versículo 9
En realidad, no se apiadaron, fue solo una excusa, pues, si se hubieran apiadado entonces no hubieran matado a todo el pueblo.
Más aún, Shaul luego matará a toda una ciudad de sacerdotes, por el solo hecho de que le dieron hospedaje a David sin saber que Shaul lo perseguía.
Don Isaac Abarbanel afirma que, tal vez, el hecho de que el rey de Amalek disponía de un buen aspecto físico ese fue el motivo por el cual les dio lástima eliminarlo.
Malvim es más enérgico y crítico y dice que lo que Shaul y el pueblo hicieron fue un crimen, pues a pesar de que Dios les había dado una orden clara y precisa en el versículo 3, ellos pretenden ser más misericordiosos que Dios y deciden perdonarlos. Cuando Dios, que es el bondadoso y misericordioso, ordena algo, no hay que tratar de ser más que Él. Shaul, erró al pretender ser más compasivo que Dios, pues de no haber sido así, nunca se hubiera apiadado de los enemigos de Dios y de su pueblo.
Daat Mikrá agrega que, al dedicarse el pueblo a tomar de los despojos y pertenencias de Amalek, lo más lógico es que se hayan distraído un poco de la persecución de los enemigos, lo que les permitió a algunos escapar y de esa manera, no pudo destruirse completamente la simiente de Amalek como la Tora ordena, es por eso que, en el futuro, veremos que David volverá a luchar contra Amalek, lo que nos demuestra que Shaul no había logrado su cometido.
De este versículo, se puede ver claramente, que no fue como dirá luego Shaul que el pueblo quiso tomar el ganado para brindarlo como ofrenda a Dios, pues aquí se ve que no quisieron matarlos, sino que lo querían para ellos.
La cima del descaro es que, en la guerra anterior, Shaul no le permitió al pueblo ni siquiera comer pan, y ahora que Dios le ordena que no tomen nada del enemigo, Shaul les permite comer y llevarse el ganado. Más aún, aquí Shaul se apiada del rey de Amalek y en la guerra anterior (14:44) estuvo dispuesto a matar a su hijo Yonatan: Y dijo Shaul: ¡Así me haga Dios, y más aún!, pues morir, morirás, Yonatán.
El versículo señala que todo lo despreciable y sin valor lo destruyeron totalmente, es decir, solo aquello que no tenía valor ni importancia, eso sí lo destruyeron y cumplieron lo que Dios dijo. Esta actitud es comparada con lo que hizo Cain en Bereshit capítulo 4, que trajo una ofrenda a Dios, pero en vez de traer lo mejor para Dios, como lo había hecho Hevel su hermano, Cain en cambio, trajo de las sobras, y de los frutos que no eran de los más lindos y selectos, pues los buenos se los dejó para él y a Dios trajo las sobras.
1 Shmuel 15 Versículo 10
Don Isaac Abarbanel sostiene que, todo tiempo en que estaban luchando contra el enemigo, es factible que aún no hayan destruido todo, pues estaban ocupados en perseguir al enemigo, pero al ser que finalizó la guerra y no destruyeron al ganado, sino que lo reagrupan y se lo comienzan a repartir, entonces Dios le habla a Shmuel para expresarle Su enojo y sentencia.
1 Shmuel 15 Versículo 11
Abarbanel es más elocuente aún, y sostiene que, Shmuel se refiere a lo que anteriormente le había advertido al pueblo en 12:14: Si teméis al Señor y le servís, escucháis Su voz y no os rebeláis contra la palabra del Señor; estaréis, tanto vosotros, como el rey que reine sobre vosotros, tras el Señor vuestro Dios.
Y se refiere a que, si bien Shaul poseía las cualidades óptimas para ser un buen rey, pues se encaminaba en pos de Dios, cumpliendo Sus preceptos y mandamientos, no obstante, aquí nos aclara que, a partir de ahora, Shaul no cumplía lo que Dios le encomendó, por lo tanto, ya no podía afirmarse que iba en pos de Dios.
El motivo de ello son dos cosas, tal como dice 1) porque se ha vuelto de en pos de Mí y 2) Mi palabra no cumplió el primero se refiere a lo que había sucedido en Guilgal, que no esperó a Shmuel tal como se lo había ordenado; y lo segundo, hace alusión a lo que había sucedido en esta guerra contra Amalek en donde dejó con vida al rey y al ganado.
Continúa Abarbanel diciendo que, el error que había cometido Shaul en Guilgal, aún tenía la posibilidad de componerse mediante el arrepentimiento sincero, el ruego a Dios y demostrar un cambio de actitud en la práctica. Pero al ver que su actitud es recurrente, y, como en este caso, más grave aún, entonces Dios decreta en forma tajante que Shaul no podrá seguir siendo el rey.
El motivo del dolor que expresa Shmuel por la destitución de Shaul, demuestra el profundo cariño que sentía por él, contrariamente a lo que podrían suponer, pues lo natural hubiera sido que exista un poco de resentimiento entre ellos, por el hecho que el pueblo haya pedido un rey y desechara a Shmuel, como lo expresó en 8:5 y 7; sin embargo, fue justamente lo contrario, Shmuel apreciaba mucho a Shaul y le demostraba su cariño, tal como lo vimos en 10:1. Y lo que más profundo le dolió a Shmuel, fue el hecho que Shaul haya desaprovechado la oportunidad de corregirse y así redimirse.
Abarbanel sostiene que, lo más probable es que Dios no le había detallado a Shmuel cuál fue el error que cometió Shaul ni por qué había determinado que no seguiría siendo rey, sino que simplemente le comunicó que Shaul había fallado en la labor que se le había encomendado. Es por eso que Shmuel continuará suplicando a Dios toda aquella noche para saber cuál fue el motivo de ese decreto tan duro por parte de Dios.
Con respecto al motivo por el cual Dios decide castigar a Shaul de esa manera, Malvim lo explica diciendo que el error de Shaul era con respecto a asuntos del reino, pues se le había ordenado algo en forma clara, pero Shaul no lo cumple porque teme al pueblo y se deja llevar por ellos, cuando en realidad debe ser al revés, es el rey el que debe dirigir al pueblo y no dejarse dirigir por ellos.
Daat Mikra, cita lo dicho por los sabios en el tratado de Iomá 22b en donde dice: Shaul pecó una sola vez y no le fue perdonado, mientras que David lo hizo en dos oportunidades y le fue perdonado. Más aún dice Abarbanel, Shaul, aparentemente cometió un error pequeño, que tuvo que ver con haberse apiadado del rey de Amalek (ser bondadoso es una cualidad que aprendemos de Dios), no obstante, Dios actuó con él en forma estricta y determinante. A esta disyuntiva responde afirmando que, con respecto al reino, dos aspectos son fundamentales; 1) ser obediente y fiel a la palabra de Dios. 2) El reino de Israel, no puede ser como los demás reinos, en los que los reyes se ven a sí mismos como semidioses, que están por sobre las leyes. Es por eso que con Shaul, Dios decretó que no podría continuar en el cargo de rey mientras que, con David, a pesar que tuvo errores, éstos no eran algo que tuvieran que ver directamente con asuntos del reino, sino más bien, cuestiones individuales y personales.
1 Shmuel 15 Versículo 12
Daat Mikra dice que no se refiere al Carmel que queda en Haifa, sino a otro sitio que se llama así y que queda dentro del territorio de Yehudá, como figura en Yehoshua 15:55, y queda a unos 12 kilómetros al sudeste de Hebrón.
Shaul construye allí un monumento para conmemorar el triunfo sobre Amalek. Radak dice que, allí se detuvo para repartir todo el botín de guerra que habían tomado. Acorde a esta opinión, tal vez el motivo por el cual se detiene allí, es para repartir antes el botín y no delante de Shmuel, con quien suponía encontrar en Guilgal que era el lugar en donde históricamente el pueblo se congregaba para algún motivo importante o para ofrendar a Dios y no quería llegar allí con todo el ganado que Dios había ordenado destruir, es por eso que pretende repartirlo entre la gente y que Shmuel no lo note.
Es interesante notar que Carmel, es citado nuevamente más adelante en el capítulo 25:2 y allí se trata claramente del territorio que queda en la zona de Yehudá cerca de Hebrón: Y había un hombre en Maón que tenía sus bienes en Carmel; el hombre era muy rico y tenía tres mil ovejas y mil cabras; y estaba en Carmel trasquilando sus ovejas. El hombre se llamaba Nabal, y su mujer se llamaba Abigail. Y la mujer era inteligente y de hermosa apariencia, pero el hombre era áspero y malo en sus tratos … Entonces David envió diez jóvenes, y les dijo: Subid a Carmel, visitad a Nabal y saludadle en mi nombre;
Probablemente Nabal haya sido uno de aquellos hombres que habían menospreciado a Shaul el día que fue coronado rey, tal como dijo en 10:27: Pero ciertos hombres malvados dijeron: ¿Cómo puede éste salvarnos? Y lo menospreciaron y no le trajeron presente alguno. Mas él guardó silencio pues veremos que en 25:25 cuando Abigail sale al encuentro de David para que no destruya a Nabal ella menciona que no debe prestarle atención a Nabal, pues se trata de un hombre malvado justamente el mismo adjetivo que mencionó en 10:27 Cuando Abigail vio a David se dio prisa y bajó de su asno, y cayendo sobre su rostro delante de David, se postró en tierra.Y se echó a sus pies y dijo: Señor mío, sólo sobre mí sea la culpa. Te ruego que permitas que tu sierva te hable, y que escuches las palabras de tu sierva. Ruego a mi señor que no haga caso a este hombre malvado, Nabal, porque conforme a su nombre, así es. Se llama Nabal, y la insensatez está con él; pero yo, tu sierva, no vi a los jóvenes que tú, mi señor, enviaste. Si esto es así, entonces, el motivo por el cual Shaul decide hacer precisamente en ese lugar un estandarte de su triunfo sobre Amalek, sea tal vez, porque quiso presentarse exactamente delante de aquellos hombres malvados que lo habían despreciado y que consideraban que no podría salvarlos, para demostrarles cuán errados habían estado, y justamente, dejar delante de sus narices ese estandarte que les demuestre todos los días de sus vidas qué grande fue el error de ellos al haber dicho: ¿Cómo puede éste salvarnos?
He citado estas dos opiniones, pues no se contradicen y tal vez ambas sean verdaderas.
1 Shmuel 15 Versículo 13
Lo más probable es que Shaul estaba festejando allí la victoria y brindando ofrendas de agradecimiento a Dios junto con el resto del pueblo y supuso que también Shmuel venía a plegarse a los festejos y por eso se adelanta a saludarlo con alegría para comunicarle la buena nueva, que, esta vez, a diferencia de la vez anterior, en esta ocasión sí cumplió con lo que le había encomendado.
Hay quien dice que, el motivo por el que Shaul se dirige él a Shmuel y no espera que llegue hasta donde él estaba, era para evitar que Shmuel vea todo el ganado de Amalek.
El asombro de Shmuel debe haber sido enorme, y se habrá quedado impactado; por un lado, Dios le había dicho que Shaul no ha cumplido Mi palabra por el otro lado, Shaul le dice: He cumplido la palabra del Señor y al ser que Dios no miente, Shmuel quiere averiguar qué es exactamente lo que Shaul no cumplió.
1 Shmuel 15 Versículo 14
1 Shmuel 15 Versículo 15
Don Isaac Abarbanel explica que Shaul, vuelve a actuar como era su costumbre, no asume la culpa y se la traslada al pueblo. Mientras que, en el versículo 9 dice claramente que él también se apiadó Y se apiadó Shaul y el pueblo de Agag, y de lo mejor de las ovejas, de los bueyes, de los animales engordados mientras que aquí dice que fue solo el pueblo. E inmediatamente, para justificar lo que hizo el pueblo y que él no lo impidió, agrega que fue con una buena intención: ofrecerlos a Dios. Es decir, no por un provecho propio, sino que fue con una intención altruista (a pesar que eso no es lo que se desprende del versículo 9)
Malvim explica que una de las condiciones fundamentales para que Dios acepte el arrepentimiento de un individuo, es que reconozca su error y lo acepte, pero aquí, Shaul no lo acepta, no lo reconoce, se lo imputa al pueblo y además lo justifica.
Daat Mikrá plantea en favor de Shaul un posible malentendido, y es que, cuando se trata de decretar que algo es considerado Jerem -anatema a Dios- tal como dice la Tora en Vaikrá 27:28 Toda cosa apartada (Anatema) para Dios, será considerada consagrada para Dios, más aún, sobre el botín de la ciudad idólatra dice la Tora en Debarim 13:17: y la pasarás a fuego a toda la ciudad y todo el botín que en ella se encuentre será quemado completamente para Dios. De aquí, la confusión que tuvieron algunos del pueblo que supusieron que, con respecto al ganado de Amalek, al ser declarado anatema para Dios, entonces podría ser ofrecido en el altar y quemarlo para Dios como ofrenda.
Continúa Daat Mikrá diciendo que, no obstante, como antes dijimos, del versículo 9 se deduce claramente que el pueblo no pensaba entregar todo el ganado a Dios, tal vez, en forma infantil, o a la usanza pagana, pensaron (como dirá luego en los versículos 21 y 22) que, ofrendando solo una parte, lograrían expiar la culpa por haber tomado del botín de Amalek y de esa manera podrían quedarse con el resto para ellos, como si se tratase de un “soborno a Dios”.
Daat Mikrá agrega que, al decir: tu Dios se refiere a una expresión de respeto, pues al ser Shmuel profeta de Dios, y que viene en Su Nombre entonces, Shaul se refiere respetuosamente así.
1 Shmuel 15 Versículo 16
Otra posibilidad que aporta Daat Mikrá es que, al ser que lo que le va a comunicar es algo duro, y teme que se encolerice contra él, es por eso que solicita su permiso para hablar y no debe enojarse y castigar al profeta por hablar algo tan duro contra el rey, pues no se trata de su palabra sino de lo que Dios dijo sobre él.
Una vez más, la alegría de la victoria se le transforma a Shaul en tristeza. La primera vez, cuando lo coronan rey, hubo quienes lo despreciaron y él lo escuchó. La segunda vez, con la victoria contra Najash, Shmuel les troca el festejo en duelo, tal como lo vimos en el capítulo 12. La tercera vez, en con la derrota de los Pelishtím por parte de Dios y que Dios no les responde.
Don Isaac Abarbanel explica que, una vez que el profeta escucha lo que Shaul le dice que tomaron del ganado de Amalek, cuando Dios había dicho que debía ser destruido, entonces, ahora Shmuel, descubre el motivo por el cual Dios había dicho que Shaul no cumplió con lo que le encargó y por lo tanto será despreciado y no será más rey, pues como dijimos antes, Dios no le lo había revelado a Shmuel el motivo, es por eso que ahora Shmuel comprende y le va a transmitir a Shaul exactamente lo que Dios le dijo.
1 Shmuel 15 Versículo 17
Daat Mikrá señala, que estas fueron precisamente las palabras que utilizó Shmuel cuando le encomendó a Shaul que destruya a Amalek en el versículo 1: A mí me ha enviado el Señor para que te ungiera por rey sobre Su pueblo, sobre Israel; es decir, tú eres el rey y debes hacer que el pueblo respete tus directivas.
Otro mensaje subliminal hay aquí, pues lo que ha hecho Shaul no se trata de algo que él decidió y que aceptó renunciar a su propio honor en pos de la voluntad del pueblo (como ya había sucedido con el juramento que Yonatan violó) sino que, al ser él ungido por Dios, su autoridad proviene de Dios, por lo tanto, todo aquel que desprecie al rey o no lo obedezca, en última instancia, está faltándole el respeto a Dios. Es por eso que los sabios afirman categóricamente: a pesar que el rey renuncie a su honor y debido respeto que se le debe guardar; aun así, su honor y respeto quedan en pie y se lo debe respetar de todas maneras, pues no tiene el rey la autoridad para renunciar a eso.
1 Shmuel 15 Versículo 18
Malvim agrega que, Dios fue muy claro en su orden, exterminarlos, eso incluye todo, por lo tanto, Shaul debería haber sido más meticuloso y cuidar de hacer exactamente lo que Dios le ordenó y no sacar conclusiones acordes a su racionamiento humano.
Daat Mikrá dice que le agrega Shmuel a Amalek el adjetivo de malvado pues no solo merece la destrucción ese pueblo por lo que le había hecho a Dios e Israel al salir de Egipto, sino también, por cómo se comportaba a lo largo de todas las generaciones, pues eran malvados, hostiles y actuaban sin la más mínima misericordia.
1 Shmuel 15 Versículo 19
Metzudat David agrega que Shmuel le dice a Shaul que no es lógico que, a causa de los caprichos del pueblo, el rey desobedezca la palabra de Dios que le encomendó.
Daat Mikrá explica que, al ser que Shaul no reprendió al pueblo por haber tomado el ganado de Amalek, a pesar de que Dios lo había prohibido, es por eso que se considera como si él mismo lo hubiera hecho y por eso es culpable tanto o más que el pueblo.
Todo esto fue para refutar el argumento que planteó Shaul de que el pueblo fue el que se apiadó y tomó del ganado, él era el rey y debería haber controlado al pueblo. Con respecto a la segunda excusa que dijo Shaul: que el pueblo no lo tomó para ellos mismos, sino “para ofrendarlo a Dios”, ante esto le dice Shmuel: que te lanzaste sobre el botín, es decir, te lanzaste sobre los bienes por interés propio, haciendo lo malo a los ojos de Dios no debe utilizar como pretexto el tema de las ofrendas a Dios. Malvim agrega que, Shmuel le insinúa a Shaul que, a causa de la ambición por los bienes materiales, has despreciado la palabra de Dios.
Shaul pretendió hacer lo que era bueno a los ojos del pueblo, pero en realidad no se preocupó de que estaba haciendo lo que estaba mal a los ojos de Dios.
Malvim, afirma que Shmuel desdice categóricamente las palabras de Shaul en el versículo 13 cuando dijo: He cumplido la palabra del Señor, aquí Shmuel sentencia: no obedeciste la voz del Señor.
Abarbanel destaca que Shmuel aún no le recrimina acerca de que haya dejado con vida a Agag el rey de Amalek, pues, como antes dijimos, Dios no le había revelado a Shmuel cuáles fueron los errores que había cometido Shaul, y éste aún no se lo había dicho.
1 Shmuel 15 Versículo 20
fui en la misión a la cual el Señor me envió Malvim dice que Shaul argumenta enfáticamente que, el hecho de que el pueblo haya tomado de los despojos y haya dejado vivo al ganado, no debe desvirtuar que sí han salido a la guerra y matado a todos los hombres y mujeres de Amalek.
Más aún dice Metzudat David, no hemos dejado vivo al ganado y lo abandonamos, lo hemos traído con nosotros “para ofrecerlos a Dios” y, de esa manera también serían destruidos.
Es por eso que agrega: he traído a Agag, rey de Amalek, y a los de Amalek he destruido por completo, como queriendo decir: “al pueblo lo destruí completamente y al rey lo he traído como símbolo de triunfo sobre Amalek y matarlo ante todo el pueblo de Israel; por lo tanto, sí he cumplido lo que Dios me ha encomendado”.
Acorde a la opinión de Daat Mikrá, esto es lo que agrega Shaul a lo que había dicho antes: que el hecho de haber traído con vida al rey y matarlo ante todos, demuestra que la intención fue cumplir al pie de la letra lo que encomendó Dios y que todo lo de Amalek sería destruido.
Aquí es cuando se entera Shmuel que además del ganado, han dejado con vida al rey de Amalek.
1 Shmuel 15 Versículo 21
Malvim explica que, Shaul también responde a la acusación de Shmuel: te lanzaste sobre el botín y enfatiza enérgicamente, que él no ha tomado nada del botín de guerra, sino que fue el pueblo el que lo hizo, no él. Y aun eso, lo han hecho para ofrecer a Dios.
Daat Mikrá sostiene, que Shaul discrepaba con la manera en que Shmuel interpretaba lo que debía hacerse con las cosas que fueron consideradas jerem -anatemas consagradas para Dios- pues él sostenía que el anatema debía traerse y ofrecerse en el altar, mientras que Shmuel (que era la opinión acertada, tal como Dios lo asevera) afirma que debe ser destruida completamente en el lugar de batalla.
Nuevamente dice tu Dios como queriéndolo complacer a Shmuel, todo esto es para honrar a tu Dios, no se trata del honor del rey.
1 Shmuel 15 Versículo 22
Otro punto importante que destaca Daat Mikrá, es que Shmuel no está diciendo que Dios no desea las ofrendas, pues esto sería contradecir lo que la Tora ordena, sino que, el ser fiel a lo que Dios ordena, está en un nivel superior a la mejor de las ofrendas que se Le pueda brindar.
Don Isaac Abarbanel explica, que Shmuel no acepta el pretexto que insistentemente alega Shaul de que fue el pueblo el que lo hizo y que fue con una buena intención, es por eso que no lo impidió. Ante esto le responde Shmuel que, para él, era claro que el pueblo tomó el ganado para ellos mismos como botín de guerra, y no como ofrenda, no obstante, aún en el caso que fuera traído para brindárselo a Dios, tal como Shaul se obstina en afirmar, también eso es una transgresión, pues el obedecer a Dios está por sobre cualquier ofrenda que se Le pueda brindar.
Por supuesto que tampoco se puede suponer que se puede “limpiar” una transgresión brindando luego una ofrenda para “sobornar” a Dios con ello y que no se “enoje” por lo que hicieron, pues esta era la usanza de los paganos, que saciaban las necesidades de sus dioses para que de esa manera lograr el favor de esos ídolos y que no se enfaden y los castiguen.
Cuando dice: que la grosura de los carneros se refiere a la parte más selecta de las ofrendas.
Si bien, el versículo aparentemente es reincidente, esto es así, porque la primera vez lo dice a modo de pregunta retórica, la segunda lo expresa como una afirmación categórica, por si acaso a alguien le queda la más mínima duda.
1 Shmuel 15 Versículo 23
Tanto Rashí como Yonatan ben Uziel, sostienen que, cuando el profeta ordena algo en nombre de Dios, todo aquel que agrega o quita algo a lo que ordenó, está transgrediendo. Pues el individuo se debe remitir a hacer exacta y puntualmente lo que Dios encomendó sin ningún agregado, tal como lo haría un siervo fiel ante su amo.
Metzudat David dice que, así como aquel que acude a los adivinos está siendo infiel a Dios y no deposita su confianza en Él sino en otros conjuros, de igual manera se comporta aquel que no obedece la palabra de Dios por temor o por influencia de otras personas.
Malvim cita el versículo de Debarim 18:14 Porque esas naciones que vas a desalojar, ellos recurren a los hechiceros y adivinos, pero tú no harás así, sino que el Señor, tu Dios un profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te hará surgir el Señor, tu Dios; a él obedeceréis.Por lo tanto, al no obedecer Shaul estrictamente lo que Shmuel (en su carácter de profeta de Dios) le encomendó, se asemeja a aquellos que escuchan a los adivinos y hechiceros.
Daat Mikrá trae otra posible interpretación y dice que, cuando un individuo se empecina en justificar sus actos sin aceptar su error cuando Dios se lo recalca, es considerado como un transgresor. A esto agrega Abarbanel, que, Shaul consideraba que había hecho lo correcto al dejar vivo al rey de Amalek y al haber traído todo lo mejor del ganado y de esa forma poder mostrar la magnitud del triunfo, no obstante, esto no es lo indicado, no se trata de hacer lo que al individuo le parece correcto, sino de cumplir exactamente lo que es bueno a los ojos de Dios, y lo que Él nos ordena, pues muchas veces, al ser humando, con su limitada percepción de la realidad, le parecen correctas ciertas actitudes, cuando no los son.
Con respecto a la segunda parte del versículo, su comprensión es más fácil de entender y se puede notar la relación en forma clara.
Don Isaac Abarbanel dice, que no se trata de algún acto en particular, sino que, la actitud de no respetar la palabra y orden de Dios, es lo que lo hace inapto para el cargo de rey. Si bien, el haber desobedecido a Dios ya estuvo mal, el negarlo y tratar de justificarlo, es aún peor.
Daat Mikrá agrega que, si bien anteriormente, en el versículo 13:14 Dios ya le había adelantado que no continuaría su dinastía en sus descendientes, ahora le agrega que él mismo no permanecerá en ese cargo, sino que no se extenderán los días de su propio reinado.
1 Shmuel 15 Versículo 24
No obstante, Abarbanel sostiene que, al decir Shaul: he transgredido el mandamiento del Señor y tus palabras está demostrando que él considera que, Dios ordenó algo, y que Shmuel agregó de sí mismo a esa orden de Dios, es por eso que dice: el mandamiento del Señor, y luego agrega: y tus palabras, como si fueran dos cosas diferentes. De estas palabras, deduce Abarbanel, que Shaul acepta que, si bien, se ha acatado la orden de Dios, ésta no ha sido cumplida tal como el profeta hubiera querido. Y aun esto, no lo ha hecho por rebeldía, sino por fuerza mayor, y Dios no condena a aquel que se vio forzado a actuar de determinada manera.
Daat Mikrá, agrega que, Shaul reconoce que debería haber escuchado a Dios y al profeta en vez que al pueblo, pero que todo eso fue por temor.
1 Shmuel 15 Versículo 25
Los comentaristas opinan que el motivo por el cual le pide que vuelva con él, es porque, al haberle pedido permiso Shmuel a Shaul, para decirle lo que Dios le había dicho, como dijo en el versículo 16, lo más probable es que se hayan alejado para que sea algo privado y que no todos lo escuchen. De aquí aprendemos otra gran lección: cuando se debe amonestar a un individuo, por más que los argumentos sean verdaderos, se debe evitar de hacerlo públicamente y así no avergonzarlo.
Malvim afirma que, cuando dice: te ruego que perdones mi pecado se refiere a que Shmuel lo perdone por no haber cumplido lo que él dijo, y al decir: vuelve conmigo y nos postraremos al Señor se refiere, para suplicar el perdón de Dios por no haber cumplido Su palabra.
Daat Mikrá explica que, cuando dice: postraremos al Señor se refiere a rezar, por un lado, agradecer y alabar por el triunfo y, por otro lado, implorar para que perdone su error.
No obstante, hay quienes ven en este apresuramiento de Shaul, para que el profeta regrese junto con él a continuar con los festejos por el triunfo, que ese era todo su objetivo, y que lo que dijo anteriormente no fue un arrepentimiento completamente sincero, sino que fue para congraciar a Shmuel y que no se enoje.
1 Shmuel 15 Versículo 26
Metzudat David dice que, si Dios lo había despreciado: ¿Cómo iría el profeta con él a prosternarse ante Dios?
Maari Kra, explica, que Shmuel le dice a Shaul, que Dios ya ha decretado su castigo, no debe seguir pensando que puede trastocar la voluntad de Dios por medio de ofrendas.
1 Shmuel 15 Versículo 27
Así, Daat Mikrá dice que se refiere a que, cuando Shmuel se volteó para irse, entonces Shaul se aferró del manto de Shmuel, para que no se vaya y allí fue cuando éste se rasgó.
Rashí sostiene que, Shmuel le dio una señal a Shaul y le rasgó su manto, diciéndole que, aquel que en el futuro romperá su manto, ese será el que le quitará el reino. Haciendo alusión a lo que sucederá en el futuro cuando David corte un pedazo del manto de Shaul para demostrarle que podía haberlo matado mientras dormía, pero prefirió no hacerlo (Shmuel 24:4) y Shaul allí reconoció: Y dijo Shaul: ¿Es ésta tu voz, David, hijo mío? Entonces Shaul alzó su voz y lloró.Y dijo a David: Eres más justo que yo, porque tú me has tratado bien mientras que yo te he tratado con maldad. Tú has demostrado hoy que me has hecho bien, ya que el Señor me entregó en tu mano y sin embargo tú no me diste muerte. Porque si un hombre halla a su enemigo, ¿lo dejará ir sano y salvo? Por lo tanto, que el Señor, te recompense con bien por lo que has hecho por mí hoy. He aquí, ahora sé que ciertamente serás rey, y que el reino de Israel será establecido en tu mano.
1 Shmuel 15 Versículo 28
Radak agrega que, si bien en Guilgal ya había sido decretado algo similar, no obstante, se le había dado otra oportunidad para ver si Shaul podría redimirse a sí mismo cumpliendo esta vez lo que Dios le encomendó sin temer al pueblo, pero no lo hizo tampoco esta vez, es por eso que Dios da Su veredicto definitivo.
Daat Mikrá dice que está expresado en tiempo pasado: y lo ha dado a tu prójimo para demostrar que es un hecho consumado.
Más agrega Daat Mikrá, si bien aquí no dice quién es ese prójimo, más adelante en 28:17 se lo dice literalmente: el Señor ha cortado el reino de tu mano, y se lo ha dado a tu prójimo, a David.
1 Shmuel 15 Versículo 29
Daat Mikrá especifica que, si bien anteriormente dice que Dios se arrepintió de haber hecho rey a Shaul, aquí, una vez que el reino le fue prometido a otro, eso es irreversible.
Metzudat David dice que se refiere a que, por parte de Dios, Él no se arrepiente, pero cuando se trata de un error del individuo (como en el caso de Shaul) entonces sí puede haber un cambio.
Radak afirma que, Dios le había entregado el reino a Shaul con la condición de que sea fiel a Su palabra y mandamientos, es decir, era condicional, tal como dijo Shmuel en 12:14 14Si teméis al Señor y le servís, escucháis Su voz y no os rebeláis contra la palabra del Señor; estaréis, tanto vosotros, como el rey que reine sobre vosotros, tras el Señor vuestro Dios. Y en 12:25 Mas si el mal obráis, tanto vosotros como vuestro rey pereceréis.
Don Isaac Abarbanel sugiere que la última parte del versículo que dice: porque Él no es hombre para que cambie de propósito se refiere a Shaul y debe entenderse que Shaul no es un hombre de aquellos que se arrepienten de lo que hicieron y cambien de opinión, sino que constantemente se justificará y echará la culpa a los demás en vez de asumirla él.
He citado muchas explicaciones a este versículo, pues no se contradicen entre sí.
1 Shmuel 15 Versículo 30
Continúa Abarbanel haciendo un profundo análisis entre David y Shaul y las diferencias entre ellos, por qué a uno se le perdonó y al otro no. Entre las cosas que menciona es que David reconocía su error, lo asumía y se arrepentía, pues el reconocer el error es indispensable como preparación para el arrepentimiento sincero, es por eso que fue perdonado, tal como dice en Proverbios 28:12 el que tapa sus pecados no prosperará, pero el que reconoce y abandona su error, es perdonado, más aún dijo David Salmos 51:5: Mis errores están ante mí constantemente, en cambio Shaul constantemente se justificaba y trataba de echarle la culpa a otros (Tal vez este error de Shaul fue tomado por David para aprender y no actuar así).
Otra diferencia es que, David nunca se avergonzó de asumir sus errores aun públicamente, mientras que Shaul cuidaba de su honor tal como dice: te ruego que me honres ahora delante de los ancianos de mi pueblo y delante de Israel en lugar de estar apabullado por lo que Shmuel le acababa de decir, él continuaba pensando en no quedar mal ante el pueblo, tal como lo hizo cuando no les impidió dejar vivo al ganado de Amalek.
Shaul se apiadó de Agag rey de Amalek, que era un pueblo despiadado y malvado, y luego Shaul no se apiadó de matar a todos los Cohanim con sus mujeres y niños de la ciudad de Nob por el simple hecho de haber hospedado a David. Mientras que David, en cambio, era implacable contra los enemigos, pero se apiadaba con los del pueblo de Israel, hasta el punto tal que, no permitió que maten a Shimhi que fue un hombre cruel que maldijo a David mientras huía de su hijo Abshalom.
El comentarista Maari Kra dice que Shaul le implora a Shmuel que lo acompañe, pues de lo contrario, el pueblo lo iba a menospreciar y burlarse de él por el hecho que Shmuel el profeta lo ha deshonrado.
Es por eso, dice Ralbag, que Shmuel, al ver que Shaul se avergonzaba, decidió acompañarlo, más, tratándose de un reino que recién se estaba constituyendo y fortaleciendo, no quiso arruinarlo.
Malvim agrega que, Shaul se resignó a que no podría sobreponerse a su debilidad, y que no tenía ya posibilidad de arreglar la situación, por lo tanto, a diferencia de lo que dijo en el versículo anterior, no le pide que se prosterne junto a él, sino que se conforma con que lo acompañe y que solamente Shaul sea el que se prosterne ante Dios.
Daat Mikrá explica que, probablemente, la intención es que nadie sepa acerca de lo que Dios le había dicho a Shmuel, pues Él no lo había enviado a que le diga a Shaul algo, por lo tanto, para que nadie sospeche, y que no comience una rebelión contra Shaul ni tampoco que el pueblo se ponga en contra del rey, por todo eso, Shmuel decide acompañar a Shmuel en los festejos por el triunfo.
1 Shmuel 15 Versículo 31
1 Shmuel 15 Versículo 32
Sin embargo, Don Isaac Abarbanel dice que, en realidad, fue lo contrario, para demostrar que no fue correcto la actitud de Shaul de apiadarse del rey de Amalek, a la usanza de los pueblos cnaanitas que dejaban con vida a los reyes enemigos ya que se trataba de un rey, sino que Shmuel decide demostrar que no se debe actuar así, es por eso que quiere él mismo darle muerte al rey, para que sepan que, con enemigos tan malvados como Amalek, no deben apiadarse de ninguno de ellos. Y a pesar de ser Shmuel anciano y profeta, de todas formas, quiso ser él, el que, con sus propias manos, cumpla el mandamiento de Dios.
Con respecto al significado de lo que dice que Agag vino a él alegremente hay entre los comentaristas, quienes afirman que Agag estaba contento pues había pensado que ya no corría peligro de muerte y pensó que lo llamaron para que esté presente en las ofrendas a Dios.
Otros sostienen que se trata de que Agag sabía positivamente que lo llevaban a morir, pero estaba contento, pues era peor para él como rey, vivir el resto de su vida como prisionero que morir en un solo momento. O, como dice Ralbag, al ver la imagen de Shmuel que inspiraba misericordia y bondad, pensó que sería perdonada su vida.
1 Shmuel 15 Versículo 33
O, acorde a la segunda opinión, Malvim dice que Shmuel le informa a Agag, que, al ser que él tanto deseaba la muerte, lo más apropiado hubiera sido dejarlo vivir como prisionero de guerra, no obstante, por el honor de aquellas mujeres que han perdido a sus hijos y han sido sumidas en un duelo profundo, es por eso que lo matará.
Y a pesar de su avanzada edad, no le tiembla la mano a Shmuel para hacer justicia y eliminar a los malvados. De esta forma, Shmuel, de una sola vez, aniquila a Agag y no teme lo que el pueblo diga; mientras, Shaul observa cómo el pueblo no dice nada ante la actitud de Shmuel, y esto le demuestra que así debería haber actuado él y que su temor al pueblo fue infundado.
1 Shmuel 15 Versículo 34
El motivo por el cual Shmuel no pide que le traigan el ganado de Amalek para destruirlo, es porque, tal como dijimos antes en la explicación del versículo 3, el objetivo de destruir todo lo de Amalek, era para demostrar que no fue una guerra para conquistar o apropiarse de los bienes y riquezas del enemigo, sino que fue a causa de la maldad de ese pueblo; pero al haber dejado vivo al ganado, ahora ya no se podía lograr ese objetivo, y esto no se podía remediar matándolos en ese momento, pues, hubieran pensado que, al matarlos ahora, fue para ofrendar a Dios, tal como había dicho Shaul.
1 Shmuel 15 Versículo 35
Y si bien dice que no lo volvió a ver hasta el día de su muerte, veremos luego en el capítulo 19:24 que nos relata un encuentro posterior entre Shaul y Shmuel, no obstante, allí se trata de algo fortuito, pues Shaul buscaba a David: Se quitó Shaul la ropa y también profetizó delante de Shmuel, y estuvo echado desnudo todo aquel día y toda la noche. Por lo que suele decirse: ¿También está Shaul entre los profetas?